En los últimos años hemos visto una avalancha de compromisos climáticos corporativos, empresas nacionales y multinacionales que prometen asumir su acción climática, e incluso los gobiernos poniéndose al frente de la situación.
Pero las promesas no son suficientes...
El espacio de la acción climática es dinámico y evoluciona rápidamente. Para conocer la posición más reciente de South Pole sobre las declaraciones corporativas, consulte nuestro informe sobre declaraciones o infórmese sobre nuestra nueva declaración de financiación de la acción climática.
... Los líderes del sector privado y público deben mostrar que se toman en serio este camino. De acuerdo con nuestra última investigación, hay mucho trabajo por hacer: más empresas han establecido objetivos de net zero medidos por etapas con objetivos de reducción basados en la ciencia, pero más del 60% han fijado sus objetivos en un futuro lejano o no tienen una fecha clara.
Ahora es el momento que las empresas dirijan sus compromisos con acciones creíbles y objetivos claros y a corto plazo, algo que a muchas les sigue costando a pesar de contar con estrategias de sostenibilidad avanzadas y equipos experimentados.
Por ejemplo, si ya tiene un certificado de neutralidad climática, ¿cómo esto contribuye a su aspiración a ser net zero? ¿debería fijar un objetivo de impacto climático positivo en lugar de un objetivo net zero? ¿O ambos?
El secreto está en los detalles, y un buen lugar para empezar es entendiendo la definición de cada afirmación. Las diferencias son materiales y sí, importan: para el planeta, para nuestras comunidades y para la reputación de su empresa.
Este es el nuevo negocio de siempre. Los consumidores están votando con sus billeteras, los accionistas están votando con sus inversiones, los entes de control están prestando atención a los riesgos empresariales relacionados con el cambio climático. La neutralidad climática ya no es de tomar partes. Tampoco es sólo para empresas que están en el nicho ecológico. Es un compromiso serio, una inversión sustancial y una declaración de priorizar la acción climática.
La neutralidad climática combina la necesidad de las organizaciones de responsabilizarse de su huella de carbono por gases de efecto invernadero (GEI) y de establecer una estrategia clara de reducción, idealmente antes de compensar las emisiones inevitables. Para las compañías, la neutralidad climática es una declaración puntual, donde sus emisiones históricas de carbono son medidas y compensadas. En comparación con la neutralidad del carbono, la neutralidad climática pone más énfasis en cubrir todos los GEI más allá del carbono, e incluye los impactos climáticos más allá de las emisiones de GEI, como el forzamiento radiativo de aeronaves, a menudo utilizado para calcular las emisiones de los viajes de negocios.
Certificar su estatus de neutralidad climática es crucial antes de hacer cualquier declaración pública. En algunos países, los sistemas administrados por el gobierno pueden certificar la neutralidad climática, como Climate Active en Australia. Si su país no dispone de un sistema o su actividad es internacional, la verificación independiente de expertos es una gran opción. Las etiquetas de neutralidad climática de South Pole están estrechamente alineadas con las normas internacionales y son consideradas como una certificación sólida.
Así que si su compañía decide ir por la neutralidad climática al medir y compensar sus emisiones del 2021 y comprometerse a continuas reducciones basadas en la ciencia, ¡felicitaciones! No oculte sus logros, porque el camino no se termina ahí…
En los últimos 100 años, la civilización humana ha hecho pocas cosas de forma consistente año tras año. Pero una cosa que hemos hecho muy bien es aumentar constantemente nuestras emisiones. Hoy debemos urgentemente detenernos y revertir esa tendencia. Tenemos que empezar a reducir las emisiones este año y todos los años hasta 2050 para lograr ser net zero y evitar las consecuencias catastróficas del cambio climático.
Sin embargo, todavía tenemos una enorme brecha de aspiraciones, y el actual conjunto de políticas climáticas mundiales no son suficientes para reducir las emisiones - Estamos lejos de esto.
Dada esta creciente urgencia por afrontar las emisiones globales, el nuevo estándar corporativo net zero de la iniciativa Objetivos Basados en la Ciencia (SBTi) anima a las empresas a invertir en proyectos y actividades que eviten y eliminen las emisiones más allá de su cadena de valor, en paralelo a la reducción de emisiones alineadas con la ciencia en todas sus operaciones directas e indirectas. Aunque la descarbonización de las empresas desempeñará un papel fundamental para alcanzar el net zero, una cantidad significativa de emisiones se produce fuera del alcance de las cadenas de suministro de las empresas. El sector privado puede desempeñar un papel monumental en la reducción de esta brecha de emisiones, apoyando el Acuerdo de París y adelantándose a la inminente regulación.
El concepto de "Net Zero" es un tema complejo y lleno de matices, pero en términos sencillos significa un mundo en el que los GEI se han reducido al mínimo y las emisiones restantes se han eliminado de la atmósfera.
Para lograr esto una organización debe:
Al invertir en soluciones climáticas inteligentes, las empresas pueden alcanzar escalafones de la neutralidad climática mientras realizan la transición hacia ser net zero.
El primer paso en cualquier proceso para ser net zero es entender el impacto de la organización en el planeta, calculando su huella de carbono con una evaluación de los GEI anuales a lo largo de toda su cadena de valor. El siguiente paso es desarrollar una estrategia para reducir esta huella. Esto puede hacerse mediante una amplia gama de medidas, como la eficiencia energética y de recursos, el cambio a energías renovables, las intervenciones específicas en la cadena de suministro y la innovación en el modelo de suministro de productos o servicios.
Además de la descarbonización continua, las organizaciones deben aprovechar al máximo las soluciones climáticas esenciales que tienen a su disposición en la actualidad, al tiempo que financian y planifican de forma proactiva la adopción de nuevas innovaciones, como las tecnologías de eliminación de carbono, basándose en los plazos estimados de cuándo estarán disponibles comercialmente
La eliminación del carbono, enfoques y tecnologías que ayudan a neutralizar las emisiones, es otra pieza del rompecabezas y un área que sigue desarrollándose rápidamente. La eliminación de carbono puede lograrse de diversas maneras, por ejemplo, mediante soluciones basadas en la naturaleza, como la reforestación, restauración de ecosistemas y la retención de carbono en el suelo, o mediante soluciones tecnológicas, como la captura y el almacenamiento directo de carbono (DACCS) con la mineralización del dióxido de carbono o el almacenamiento geológico... ¡o incluso una mezcla de ambas! La eliminación de carbono nos lleva a la siguiente etapa del recorrido, que es el impacto climático positivo (o carbono negativo).
El impacto climático positivo (o a veces denominado "carbono negativo") es el objetivo final. Ser net zero no es más que una (gran) etapa. A partir del año 2050, tenemos que eliminar de la atmósfera más gases de efecto invernadero de los que emitimos para garantizar un medio ambiente seguro para las generaciones futuras.
Aunque actualmente no existen marcos de responsabilidad oficiales que respalden la declaración de que una empresa es de impacto climático positivo o carbono negativo, ambas describen un escenario en el que se eliminan más GEI de los que se emiten después de haber reducido, a una cantidad mínima alineada con la ciencia, sus emisiones en todos los niveles. Las afirmaciones deben hacerse con mucho cuidado. Ante todo, las empresas deben descarbonizar rápidamente. South Pole participa en varios grupos de trabajo para ayudar a que esto quede más claro para las empresas.
Entonces, ¿puede una empresa ser de impacto climático positivo o carbono negativo? Microsoft ciertamente lo cree, y asumió este compromiso a principios de 2020: "Para 2030 Microsoft será carbono negativo, y para 2050 Microsoft, eliminará del medio ambiente todas las emisiones de carbono que la empresa ha emitido directamente o por consumo eléctrico desde su fundación en 1975".
Convierte la ambición en acción y únete a la transición con otras empresas que están tomando medidas REALES para revertir el cambio climático. No importa en qué punto del camino te encuentres, South Pole puede ayudarte a dar el siguiente paso hoy mismo.
1 La Iniciativa de Objetivos Basados en la Ciencia define que el estado net zero se ha alcanzado cuando las emisiones se han reducido en promedio en un 90% con respecto al año base, y las emisiones residuales se han neutralizado mediante créditos de eliminación.